Mierda


Todos y cada uno de nosotros hemos pisado alguna que otra mierda en nuestras respectivas vidas. Algunos hemos pisado mierdas pequeñas y otros hemos pisado mierdas enormes, es un hecho, incluso la mas pequeña de las rencillas supone un gran problema para quien no está acostumbrado a sufrir contratiempos, mientras que un gran desbarajuste en alguna que otra situación no supone más que una pequeña piedra en el camino de quién no para de encontrarlas. Hay quién se escuda eternamente detrás esos problemas, no digo que no puedan o que no debieran, pero usar esos problemas como excusa para justificarse de todo lo que hacen en su día a día puede resultar muy triste, triste y molesto para los demás, que en ocasiones pueden sentir sus vidas eclipsadas por la mierda de los demás.

Yo mismo me he estado justificando, jugando con mis excusas bien escojidas, bien preparadas, bien ensayadas. Me he escudado detrás de mi enorme montón de mierda durante mucho tiempo, demasiado tiempo. Si, es cierto que quizás no he llevado una vida de ensueño durante los ultimos años, quizás es cierto que merezco poder usar mi lucha para salir adelante como rampa a un estatus superior, ser "ese pobre chaval que ha luchado para tener lo que tiene no como el resto". Pero eso es completamente y irrefutablemente falso, a lo mejor me he ganado cierto grado de respeto por parte de los que lo han tenido más facil, pero eso no me concede el derecho de juzgar a nádie, y menos de despreciar a nádie. No puedo pasarme el resto de mi vida usando mis problemas como excusa para justificar acciones que yo mismo cosidero poco justas sinó amorales.

Y llegó el momento de ponerle fin a todo esto, de dar el penúltimo paso*, la penúltima piedra que pondrá punto y final a mi cambio radical personal, y para hacerlo me he propuesto dejar de usar las mismas excusas que uso para los demás con mi mismo, por ejemplo usar el "me han hecho mucho daño" para evitar arriesgarme y experimentar sensaciones nuevas, porque para triumfar hace falta probar y errar, y aunqué probablemente no triumfe demasiado siempre obtendré un bien muy preciado, experiencia, que es algo maravilloso pues nos permite identificar un error cada vez que volvemos a cometerlo.

*Falta otra cosa más antes de poder afirmar que he conseguido completar mi cambio radical, y es algo que me va a doler en el alma, deshacerme de Axel Prat.

No hay comentarios: